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Singapur, 31 dic (EFE).- Asia será escenario en 2024 de elecciones claves para la región y el resto del mundo, con comicios en Taiwán, que marcarán tanto las relaciones entre China y la isla autogobernada como entre Pekín y Washington, y citas electorales en las mayores democracias del continente: India e Indonesia.
Las más importantes en clave internacional serán las de Taiwán, que celebra el próximo 13 de enero unas elecciones presidenciales cuyo resultado marcará el curso de su política respecto a China, en un momento de crecientes tensiones entre Taipéi y Pekín, que reclama la soberanía sobre la isla.
El candidato del gobernante Partido Democrático Popular (PDP) y actual vicepresidente, William Lai (Lai Ching-te), encabeza las encuestas, y a él se enfrentan Hou Yu-ih, del Kuomintang (KMT), y Ko Wen-je, del Partido Popular de Taiwán (TPP).
Sobre las elecciones planea la sombra de China, que califica al PDP de “independentista”, después de que los dos mandatos de la actual presidenta, Tsai Ing-wen, se hayan visto afectados por el recrudecimiento de las tensiones con Pekín, y entre la capital china y Washington.
El resultado de los comicios de Taiwán, isla a la que Washington suministra armamento y que en principio defendería en caso de ser atacada por China, será determinante para las relaciones entre las dos primeras potencias mundiales.
Modi en India, dudas en Pakistán y tensión en Bangladesh.
La mayor democracia del mundo, India, con 1.428 millones de habitantes, celebrará en abril y mayo unas elecciones generales en las que el primer ministro, Narendra Modi, parte como el gran favorito para alzarse con un tercer mandato consecutivo.
Para hacer frente al partido nacionalista hindú de Modi, el Bharatiya Janata Party (BJP), la oposición formó en julio la coalición Alianza Nacional Inclusiva para el Desarrollo de la India (INDIA, en inglés), integrada por más de una veintena de formaciones, entre ellas el histórico Partido del Congreso (INC) de la dinastía Nehru-Gandhi.
India, que ejerció este año la presidencia del G20, el grupo de las principales veinte economías mundiales, puso entonces a prueba su nuevo protagonismo mundial y su deso de eablecerse como la voz del Sur Global y hacer de contrapunto de China en la región.
El vecino Pakistán también se dirige a las urnas el próximo 8 de febrero, con la incógnita de quiénes serán los candidatos de los principales partidos políticos, a la espera de varias resoluciones judiciales.
El ex primer ministro Imran Khan, líder de la principal formación opositora, el Pakistan Tehreek-e-Insaf (PTI), permanece en prisión desde agosto acusado de múltiples delitos, mientras el también ex dirigenteNawaz Sharif prevé concurrir a las elecciones al frente de la Liga Musulmana de Pakistán-N (PML-N), aunque está a expensas de que se levante una sentencia que lo inhabilita.
Por su parte, Bangladesh cuenta los días para sus comicios generales el 7 de enero de 2024, en medio de un enfrentamiento entre el Gobierno y la oposición, que exige la dimisión de la primera ministra, Sheikh Hasina, y la formación de un Gobierno interino.
Despedida de Widodo en Indonesia
Indonesia, la tercera mayor democracia del mundo con unos 205 millones de habitantes llamados a votar el 14 de febrero, se despide el próximo año del presidente Joko Widodo, que ya no puede presentarse a un tercer mandato.
Las elecciones en la mayor economía del Sudeste Asiático tienen el foco en la candidatura del ministro de Defensa, Prabowo Subianto, que fue el oponente de Widodo en los dos pasados comicios y lidera las encuestas gracias a una campaña de limpieza de imagen y a llevar de número dos a un hijo del actual presidente.
Subianto, yerno del dictador Suharto (1968-1998) y expulsado del Ejército tras ser acusado de violaciones de derechos humanos como jefe de las fuerzas especiales (1995-1998), se enfrenta al exgobernador de Yakarta Anies Baswedan y al líder del partido de Widodo y exgobernador de Java Central, Njar Pranowo.
El país, la nación musulmana más poblada del mundo, ha visto su perfil global elevado con el mandato de Widodo, especialmente tras su aplaudido liderazgo del G20 antes de India. EFE
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