Esta semana entró a regir oficialmente la reforma laboral, tras la sanción de la ley por parte del presidente Gustavo Petro, y con esto, las empresas deben empezar a prepararse para los cambios, normativos y fiscales que conllevarán las nuevas reglas de juego, especialmente por el aumento de costos en las nóminas.
En charla con Portafolio, Jaime Arrieta, CEO de Buk, aseguró que acá hay un factor adicional a tener en cuenta y es el crecimiento de la inteligencia artificial y el atractivo que está ganando en el mercado laboral, no solo por su versatilidad a la hora de aplicarse, sino por lo económico que sale para las organizaciones.
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¿Cómo prepararse para la reforma laboral?
Muchas de las cosas de la reforma laboral que está siendo impulsada por el presidente Petro ya las vivimos en Chile. Cerca del 75% de los temas que se aprobaron ya los conocimos y nos dejó claro que tienen distintos impactos. Obviamente buscan una mayor protección al empleo pensando en el empleado, que está súper bien, pero también tiene un impacto que hay que tener bien consciente.
Esas son el crecimiento de la economía y la formalidad del empleo, siendo esto último algo que destaca en Colombia, ya que lamentablemente la informalidad laboral está por encima del 50%, que es bastante alta, y la desocupación está al 10%, que no es una cifra para nada despreciable y hay que cuidar de cerca.
Jaime Arrieta, CEO de Buk.
Cortesía – A.P.I.
¿Hay riesgos a cuidar?
Estas leyes deben tomarse con mucho cuidado, porque van a tener un impacto económico significativo, especialmente en la formalización del empleo y, sobre todo, en las pymes, que serán el sector al que más le costará adaptarse a estos cambios. Luego vienen consecuencias que no se ven en otros países, comienzan los subsidios y ciertas medidas compensatorias que terminan generando distorsiones.
Al final, todo esto afecta el dinamismo y la liquidez del empleo, que es un tema fundamental y que no deberíamos perder de vista. Está muy bien proteger el empleo, claro que sí, pero también hay que cuidar la institucionalidad, siempre y cuando no se afecte la formalidad, la calidad del trabajo y, por supuesto, el crecimiento económico. Por eso es clave tener muy claras las líneas que no se deben cruzar.
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¿Se pueden soportar los cambios?
Colombia está creciendo entre el 2% y el 3% del PIB, y antes nos alegrábamos cuando crecíamos al 5%. Tenemos que volver a eso. Estamos en Latinoamérica, con mucho potencial por desarrollar y no podemos conformarnos con crecer al ritmo de un país desarrollado cuando todavía estamos en etapa de ponerse al día.
Generalmente, este tipo de leyes con alto impacto suelen implementarse de manera gradual. Los cambios tienden a ser paulatinos. Tenemos, por ejemplo, el caso de la jornada de 40 horas, que no se redujo de un día para otro, sino que se está ajustando progresivamente cada año.
Por eso, es clave asesorarse muy bien en aspectos legales y también en todo lo relacionado con tecnología, especialmente con los softwares de recursos humanos. Ahí es donde tomamos un rol importante y debemos realizar rápidamente todos los ajustes para que la normativa quede implementada en nuestras plataformas, porque su impacto se siente en el momento en que entra en vigencia.
Presidente Petro sancionó la reforma laboral.
AFP
¿Qué riesgos perciben?
Este es un tema que debe manejarse con mucha precisión, sobre todo ahora con la irrupción de la inteligencia artificial. Si los costos de contratación de las personas siguen aumentando, muchas empresas podrían optar por reemplazar personal con tecnología o IA. Por eso, es fundamental tener este riesgo en el radar.
Las empresas deben anticiparse y considerar estos cambios dentro de su presupuesto, repensar sus flujos de trabajo, identificar qué procesos pueden ajustarse y prever cómo estos impactos modificarán su operación. En ese escenario, el rol de los abogados laborales y de los softwares especializados en recursos humanos, como Buk, se vuelve clave.
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¿Se están preparando las empresas?
Desde nuestro lado, hemos estado activos en la generación de conocimiento y realizamos webinars, desayunos informativos y espacios de formación para mantener a todos actualizados. Aprovecho para invitar a las empresas y líderes de talento humano a que participen en estas discusiones.
Una de las cosas que más valoro del ecosistema de recursos humanos es su sentido de comunidad, ya que muchos líderes comparten información, discuten en grupos de WhatsApp, se apoyan mutuamente. Es muy valioso que sigan haciéndolo y que también hagan sentir su voz en los medios.
Reforma laboral.
Imagen generada con Inteligencia Artificial – ChatGPT
¿Se volverá la IA un actor importante?
El cambio es drástico y muchas veces se habla de inteligencia artificial (IA) como algo a futuro, pero en el área de recursos humanos ese futuro ya llegó. De hecho, estamos viendo un antes y un después muy claro, con transformaciones concretas en la operación diaria.
La IA ya está cumpliendo un rol fundamental, especialmente en las tareas más repetitivas y operativas. Un ejemplo dramático es el de selección de personal, donde un analista de selección puede estar a cargo procesos con grandes fuentes de datos, que revisa con esta herramienta y optimiza el tiempo, sin perder calidad.
La inteligencia artificial está automatizando tareas administrativas y repetitivas, permitiendo que el área de recursos humanos asuma un rol mucho más estratégico. En lugar de estar atrapados en la operación, los equipos pueden enfocarse en mejorar la experiencia del colaborador, diseñar políticas más efectivas, y agregar verdadero valor al negocio.
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¿Se deshumaniza el manejo de personal?
Es un tema sobre el que hay mucha discusión, y nosotros lo estamos viendo de cerca. En las empresas que están más avanzadas en el uso de inteligencia artificial, lo que observamos es que el rol humano cobra aún más relevancia.
Yo lo veo al revés de lo que muchos piensan y es porque hay un complemento total entre lo que hace la IA y la supervisión humana. La IA, hoy por hoy, no puede tomar decisiones por sí sola con la calidad que se requiere; necesita ser guiada, monitoreada y orientada.
Por eso, no lo veo como un reemplazo del talento humano, en absoluto. Todo lo contrario, la tecnología permite hacer más con los mismos recursos, y eso potencia el rol del equipo humano. Es especialmente visible en áreas como recursos humanos, donde el equilibrio entre automatización y criterio humano es fundamental.
