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Una de las principales iniciativas del Distrito para mejorar la calidad de vida de las comunidades en los bordes urbanos y mitigar el impacto del cambio climático, son los ecobarrios. Este concepto se refiere a la incorporación de prácticas sostenibles y reducción del consumo de los recursos naturales en los territorios.
En ese sentido, Bogotá cuenta con dos intervenciones de barrios sostenibles uno en La Perseverancia en la localidad de Santa fe y el segundo en El Cortijo- Ciudadela Colsubsidio en Engativá, primer ecobarrio en este sector que se encuentra en su fase final de implementación y será entregado a la comunidad en marzo de 2022.
La Secretaría del Hábitat, entidad que encabeza este proyecto, señala que existen tres requisitos principales para ser un Ecobarrio en la ciudad; tener una ubicación estratégica urbano ambiental, es decir cerca a un río, un humedal o cerca de los cerros, ser un barrio legal y, por último, tener una comunidad de base que haya realizado procesos comunitarios alrededor de temas ambientales o de sostenibilidad.
Este es el caso de los barrios El Cortijo y Ciudadela Colsubsidio, ubicados en el borde de la ciudad cerca a la calle 80, que colindan con el río Bogotá y el humedal Juan Amarillo. Además, están configurados a través de conjuntos residenciales y tienen muchas zonas verdes, huertas comunitarias y procesos ambientales con la comunidad.
De acuerdo con César Augusto Marín, Subdirector de Operaciones de la Secretaría Distrital del Hábitat, “Con el Ecobarrio en El Cortijo-Ciudadela Colsubsidio pretendemos desarrollar una estrategia de intervención pedagógica con trabajo ciudadano, para hacer un diseño participativo en los barrios que vamos a intervenir y lograr la implementación de buenas prácticas sostenibles en el espacio público”.
Por su parte, Juan Manuel Castañeda, líder del proyecto de Ecobarrios de la Secretaría del Hábitat, destaca que “un ecobarrio termina siendo un concepto que habla de la incorporación de técnicas o tecnologías en la arquitectura y el urbanismo, para disminuir algunos de los consumos de los recursos naturales, hacer un manejo óptimo del agua, de la energía, de los residuos, pero también surgen como acciones para volver la ciudad más adaptable y resiliente ante el cambio climático”.
Las prácticas sostenibles que se fortalecen en estos barrios, se centran en cinco aspectos fundamentales; ahorro y eficiencia energética, uso eficiente del agua, infraestructuras verdes, mejoramiento de la calidad del aire y eficiencia en el manejo de residuos y materiales.
“En el caso del ecobarrio Ciudadela Colsubsidio-El Cortijo, en materia de eficiencia energética, se implementaron prácticas para disminuir el consumo de la energía y se recurrió a energías alternativas, como es el caso de los paneles fotovoltaicos, se instaló un sistema para la recolección de aguas lluvias para aquellos sucesos que no son potables, como los de riego. En el caso de las infraestructuras verdes, se aumentó la jardinería y se han apoyado los procesos de fortalecimiento de las huertas comunitarias”, afirma Castañeda.
En la imagen se observan los pisos tipo deck en instalados en el barrio, que se utilizarán como espacio para que los habitantes puedan tener reuniones pequeñas y hacer juegos con los niños, sin afectar la zona verde. Foto: Secretaría del Hábitat.
Agrega que, “en cuanto a la calidad del aire, el proyecto está enfocado en la movilidad alternativa y sostenible para reducir las emisiones en la ciudad, por lo que se están instalando bicicleteros, puntos para reparación de bicicletas, bancas y mobiliario adecuado para los peatones. También se está hablando del tema del manejo de los residuos sólidos, implementando mobiliario o infraestructura que sirve para la adecuada separación de estos residuos”.
La comunidad juega un papel fundamental en la creación, consolidación y preservación de estos ecobarrrios, como lo destaca Laura Peña de la Fundación Colectivo Somos Uno, organización ciudadana de la localidad de Engativá, que brinda educación comunitaria con la naturaleza como maestra y que ha sido protagonista de este proyecto.”.
Los habitantes del sector de El Cortijo-Ciudadela Colsubsidio desarrollan actividades de jardinería. Foto: Secretaría del Hábitat.
“Lo que más resaltamos de este proyecto con Hábitat, es que nuestra comunidad va a contar con tres tanques de recolección de agua de 5.000 litros cada uno, donde vamos a tener reservas agua en época de sequía, y esto nos permitirá mantener en buen estado los jardines y las huertas existentes. Además, los murales educativos también le han dado vida a algunas zonas, y la gente se acerca a preguntar de qué trata todo, así que ya mucha más gente sabe que en el barrio hay huertas, compostaje, humedales, animales, caminatas y encuentros, y eso es muy valioso porque los procesos van creciendo”.
Otro de los objetivos de esta iniciativa, se establece en torno a la articulación de la comunidad, para el fortalecimiento de sus procesos productivos y emprendimientos. Al respecto, Sandra Liliana Abril, ambientalista, quien forma parte del proyecto Engativá emprende y que ha participado de manera activa en la iniciativa de este ecobarrio, destaca los proyectos que se han creado alrededor de las huertas urbanas y la necesidad darlos a conocer.
“Nuestro ecobarrio puede volverse un espacio turístico, en la medida en que podamos hacer visitas guiadas para que se conozca su historia. Ciudadela Colsubsidio tiene un diseño exclusivo, no hay otro barrio igual y eso nos hace únicos desde el principio. Cuando se inaugure este barrio sostenible, vamos a tener una feria empresarial con todos los proyectos y emprendimientos, actualmente hay 6 huertas activas, cada una tiene sus procesos de siembra y se están cultivando diferentes productos como papa, yuca, maíz, cebolla, apio, hierbas aromáticas y frutas, entre otros”, afirma Sandra.
En la foto, los tanques subterráneos de recolección de aguas lluvia, que se utilizarán para hacer riego de las huertas urbanas que son gestionadas desde la comunidad. Foto: Secretaría del Hábitat.
De otra parte, en materia de protección animal, se instalaron pajareras y comederos públicos para mascotas. Además de jardines polinizadores, que permiten que especies como abejas, aves pequeñas y algunos insectos se vuelvan conectores entre las zonas verdes y el humedal.
“Otra de las acciones y buenas prácticas que estamos implementado es la siembra de plantas polinizadoras que lo que permiten es fortalecer todo el trabajo que hacen las especies que polinizan, por ejemplo las abejas. Hay otras plantas que por sí solas con el viento polinizan otros territorios y sirven de base escala a algunas especies de fauna que están viajando entre la estructura ecológica principal de la ciudad y junto con la comunidad, definimos cuáles son las especies que se requieren y con el apoyo del Jardín Botánico, establecimos aquellas que tienen mayor durabilidad y resistencia para el espacio público, pero que también ambienten y cualifiquen el paisaje inmediato que tiene el barrio El Cortijo”, afirma César Marín.
Para garantizar la sustentabilidad de este proyecto a largo plazo, la Secretaría del Hábitat, cuenta con garantías de calidad sobre la infraestructura, y ha trabajado con la comunidad y entidades como Alcaldías locales, para crear acuerdos sobre el uso y mantenimiento del ecobarrio de El Cortijo-Ciudadela Colsubsidio, cuyo desarrollo tuvo una inversión superior a los $390 millones y beneficiará a 47.253 habitantes de este sector.
“Entregaremos este ecobarrio como una inversión en intervención pública que, en el caso de El Cortijo, está por alrededor de los $398 millones. La inversión va a permitir que se pueda dar continuidad a estas actividades que buscan mitigar los efectos del cambio climático que tiene la ciudad, sobre todo con un proceso de capacitación y de adaptación de estos espacios a las condiciones específicas que tiene cada uno de los territorios”, precisa Marín.
Durante el 2021, para la ejecución de los proyectos de Ecobarrios, se tuvo acompañamiento de entidades como la Secretaría de Salud, que ha realizado jornadas de salud pública y ambiental; la Secretaría de Ambiente y el Jardín Botánico que han apoyado y orientado a la comunidad en los procesos de jardinería y cultivo en las huertas.
Así mismo, en el proceso de fortalecimiento comunitario, se ha trabajado con entidades como el IDU y la UAESP con jornadas informativas y de sensibilización sobre el manejo de residuos, recolección de aguas lluvias y capacitaciones para la incorporación de estas prácticas sostenibles en los territorios.
La administración de la alcaldesa Claudia López, tiene como meta entregar a la ciudadanía 8 de estos ecobarrios, para mejorar la calidad de vida de los habitantes y fortalecer el camino hacia una Bogotá más sostenible.
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