En algunos casos, renunciar a un trabajo puede resultar una situación incómoda. Por eso muchas personas optan por comunicar su decisión de dejar su empleo por mensajes de WhatsApp o a través de redes sociales.
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Si bien es una alternativa práctica y fácil, no siempre es la más conveniente e incluso puede generar escenarios más incómodos que la propia renuncia.
Ante el posible escenario de una salida de la empresa en la que trabaja, los expertos recomiendan hacerlo de manera personal y física, o por medio de canales oficiales como correos electrónicos o directamente en las áreas de recursos humanos.
(Vea: Lo que dice el Gobierno sobre el supuesto recorte de recursos al Icetex).
Para los expertos de talento humano, una de las mayores desventajas de utilizar WhatsApp o redes sociales para renunciar son las consideraciones y consecuencias legales, debido a que no presentar una renuncia formal puede generar dudas sobre la fecha de finalización en el trabajo.
Esto podría ocasionar pérdidas económicas en la liquidación o incluso demandas y pleitos jurídicos.
Así mismo, hacerlo por estos medios podría ser interpretado como una falta de compromiso y una forma de darle poca importancia a la situación, situación que no es conveniente para el futuro en caso de necesitar una recomendación laboral.
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Según los expertos, la ausencia de señales no verbales puede dar lugar a malentendidos, que siempre será mejor descartar en el mercado laboral.
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