La Computadora Automotriz es también conocida como PCM (Powertrain Control Module). Esto significa “Modulo de Control del Tren de Potencia”, por lo que es fácil deducir su función principal, controlar el tren de potencia: sistema de ignición, sistema de inyección de combustible y control de emisiones.
Otras funciones
Otras funciones comunes de la computadora automotriz, especialmente en los modelos de vehículos más recientes, son las de controlar la transmisión, regular el voltaje del sistema carga, establecer y controlar los ciclos de encendido y apagado del electro-ventilador, reducir la potencia interactuando con el sistema ABS cuando existe control de tracción, incluso interactuar con el sistema de control automático de temperatura para operar el ciclo de funcionamiento del compresor del aire acondicionada y algunas funciones de seguridad. Claramente, son muchas y muy importantes funciones en total, por lo que conocer y asegurar el correcto funcionamiento de la computadora automotriz se vuelve vital para cualquier técnico o persona relacionada con este ámbito.
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¿Cómo funciona la computadora automotriz?
Para llevar a cabo todas las funciones antes mencionadas, la computadora automotriz cuenta con un procesador de información de 16 o de 32 bits, los cuales son capaces de procesar grandes cantidades de información y así dar las respuestas necesarias para el correcto funcionamiento de los sistemas que controla. Pero, ¿qué información procesa? ¿de dónde proviene dicha información? La computadora automotriz está conectada a una serie de sensores, los cuales captan la información que necesita la computadora para llevar a cabo sus tareas. Por ejemplo, el sensor de oxígeno le da la información referente a la mezcla aire-combustible a la computadora automotriz para que ésta a su vez controle la cantidad de combustible que debe ser inyectado con el fin de lograr una mezcla ideal.
Sin embargo, muchos de estos sensores tienden a deteriorarse a través del tiempo o por contaminación con los productos de la combustión, fugas de aceite o de líquido refrigerante entre otros. Es aquí donde la computadora automotriz muestra que su poder va más allá de las funciones que ya se mencionaron. No sólo interactúa con los sensores para controlar los sistemas relacionados con el tren motor y algunos otros sistemas, sino que en el caso de recibir información con cambios significativos, genera una alerta a través de la luz de chequeo del motor en el tablero del vehículo y estableciendo un código de falla, el cual será fácil de leer y analizar posteriormente mediante el uso de un equipo de diagnóstico o scanner automotriz.
En este último caso, el mismo scanner puede ser usado para reprogramar la computadora y así retomar el correcto funcionamiento una vez que la falla haya sido reparada. Sin embargo, para los casos en los que no se cuente con un scanner con la función de reprogramación, es recomendable también realizar un recorrido de conducción en el que se superen los 50 km/h ya que muchas de estas computadoras logran recalibrarse y reajustarse de manera automática luego de un recorrido de este tipo.
