Las ocupaciones peores pagadas suelen corresponder, en todo el mundo, con ciertas características que tienden a vulnerar los derechos de los empleados, como la informalidad, la ausencia de seguridad social o la baja calificación técnica requerida. Y la inteligencia artificial puede ser una herramienta muy útil para señalar cuáles son los 5 trabajos peores pagados en Bogotá, la capital de la nación.
Trabajos en Bogotá: los cinco peores pagados
A continuación, el ranking del ChatGPT sobre los cinco trabajos en la capital colombiana en los que se suele recibir la remuneración más baja:
1) Trabajadores de mensajería y domiciliarios (informales):
Aunque los domiciliarios y mensajeros pueden ganar más en aplicaciones, en el sector informal o en trabajos que no dependen de plataformas, suelen recibir un pago mínimo o por debajo del salario mínimo legal. Esto se debe a que muchos están en empleos sin prestaciones y no reciben beneficios como seguridad social o auxilios de transporte.
2) Trabajadores de limpieza y Aseo:
El personal de aseo en lugares como oficinas, edificios o comercios suele recibir un salario bajo, y aunque se les paga el mínimo, muchos también trabajan sin contrato formal o con pagos por día, lo que limita su estabilidad y acceso a beneficios. Además, si son empleados por cooperativas o empresas de tercerización, los pagos tienden a ser aún menores.
3) Ayudantes de construcción (sin experiencia):
Los ayudantes sin especialización o experiencia ganan por lo general entre un 60% y 70% del salario mínimo. Además, en muchas obras no se les asegura estabilidad laboral, y en ocasiones trabajan por jornadas o por días. La falta de contrato formal es común, lo que les impide acceder a prestaciones de salud o pensión.
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Los ayudantes de construcción son de los peores pagados
Fuente: IStock
4) Vendedores ambulantes:
Aunque algunos pueden generar buenos ingresos en épocas específicas, en general, los vendedores informales suelen tener ingresos variables y, en muchos casos, bajos. Dependen del flujo diario de personas y de las ventas realizadas, sin ninguna seguridad laboral. Además, suelen estar expuestos a controles y sanciones, lo cual incrementa su inestabilidad.
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5) Operarios de planta en pequeñas fábricas o maquiladoras
En Bogotá existen pequeñas fábricas de confección o ensamblaje que emplean personal por debajo del salario mínimo. Algunos operarios, especialmente en maquilas, reciben un pago por producción (por pieza o prenda), lo que limita su salario si no alcanzan cuotas mínimas. Este tipo de trabajos a menudo se realiza en condiciones exigentes y con jornadas extensas.
